AUNE HARTMANN SE DIRIGE EN ESTOS MOMENTOS A PUNO

Foto de Rodrigo Carmi de la costa peruana. Las aguas del Océano Pacífico captadas por el lente de Carmi. A lo lejos sobre los islotes se pueden ver las aves guaneras que pululan la costa de Perú. Ver más fotos del fotógrafo Rodrigo Carmi en la siguiente direccción de internet: ( www.pbase.com/rcarmi/peru )



Nuestra productora Aune Hartmann ( aunehartmann@gmx.de ), con lo poco que ha reunido de la gente bondadosa, lleva en estos momentos ayuda a la población de Puno, Perú, quienes están padeciendo en estas fechas una intensa ola de frío. Aune se halla en estos instantes camino, a través de los Andes, hacia el altiplano peruano. Hace tres días dejó atrás la ciudad de Lima, capital de Perú, atravesando la costa del Pacífico hasta la altura del departamento de Arequipa, desde allí se dirige hacia la zona sureste de Perú con dirección a Puno, situada a 3,800 metros sobre el nivel del mar. Según nos informa telefónicamente nuestra amiga Natalia Lévano Casas, fundadora de Apus del Perú, en Heidelberg, Alemania, (http://www.apusdelperu.de/ ) la carretera entre Cusco y Puno está bloqueada por un paro.

Lo resaltante de esta campaña es la solidaridad que están mostrando muchas personas al enterarse del friaje que afecta a la población andina que vive sobre los 2,500 metros de altura. Clubes departamentales, clubes de fútbol, asociaciones de vecinos peruanos, y otras entidades como nosotros desde Alemania, se han sumado a la ayuda de la gente necesitada de abrigo en estos momentos a consecuencia del frío.

Las poblaciones de la región andina sur de Perú, no están acostumbradas a estas bajas temperaturas, y más aún si hablamos que entre agosto y setiembre de este año los termómetros llegarán a marcar los 25 grados bajo cero, de acuerdo a pronósticos de los especialistas.

Llevando un sólo sol un sólo dólar o un sólo euro es un gran paso para dar la mano a los ciudadanos altiplánicos peruanos. Existen muchas regiones peruanas castigadas por el frío, inclusive en Bolivia y Argentina, pero lamentablemente sólo podemos llevar ayuda y aliento a la zona de Puno. Esperemos que otros sigan nuestros pasos.