Cuadro de la pintora hispano-mexicana Remedios Varo, cuya obra, se merece un reconocimiento histórico, ante el olvido, en el marco del centenario de su nacimiento. Fuente fotográfica: Remedios Varo Por Eréndira Estrada
Remedios Varo y su legado artístico sigue aún en espera de ser visto por el mundo.
A 100 años del nacimiento de la pintora mexicana de origen español Remedios Varo, la historia aún no le ha hecho justicia, a pesar de haberse consolidado como una artista nata impulsora del movimiento surrealista mexicano, junto con sus colegas Frida Kahlo y Leonora Carrington, su obra sigue desconocida, sobre todo en el continente europeo, particularmente en Espana.
¿Quién fue Remedios Varo?, se preguntarán; fue una pintora nacida en Anglés, provincia de Gerona, España, donde desde temprana edad dio muestra de sus dotes artísticas las cuales, gracias a su padre, pudo desarrollar en la Academia de San Fernando, en Madrid, España, convirtiéndose así en una de las primeras mujeres que estudiaran arte en tan prestigiosa academia y en donde compartiría aulas con Salvador Dalí y Gerardo Lizárraga, quien más tarde se convertiría en su esposo.
En el año de 1935 se divorcia y viaja a París, donde conocería al poeta Benjamín Peret, segundo compañero sentimental y quien la introduce al grupo de surrealistas integrados por Bretón, Miró, Eluard, Desnos, Max Ernst y todos esos jóvenes creadores de una nueva contracultura. Sin embargo, al estallar la segunda guerra mundial es aprehendida y confinada a un campo de concentración del cual logra salir gracias a la ayuda del Comité de Rescates de Emergencias, es por ello que busca refugio en México, país en donde creará sus obras más importantes.
Para ganarse la vida en su nueva patria, Remedios hace toda clase de trabajos,sobre todo como ilustradora publicitaria y decoradora. Pero fue Walter Gruen, su segundo esposo, es quien la impulsa a dedicarse de lleno a la pintura. Dentro de su círculo social se encotraban, Frida Kahlo, Octavio Paz, Diego Rivera y Leonora Carrington, quien la llamaría como su alma gemela artística.
La obra de Remedios Varo está plasmada de cuerpos humanos estilizados con elementos oníricos y arquetipos, la atmósfera que plantea en sus cuadros son de tipo medieval que hacen recordar un mundo de magos y alquimistas. Sus trabajos son poéticos, místicos e introspectivos. Plasma en ellos sus vivencias de la infancia, los sufrimientos de la guerra, recorre los mundos científicos al interpretar desde su punto de vista las teorías de la gravitación y la relatividad; también se adentra por los caminos del cábala, el tarot, la filosofía y la religión.
Es interesante hacer notar que la Varo tenía un estilo narrativo de inclinación feminista, rechazaba las interpretaciones de los artistas surrealistas como Dalí y Bellmer que apuntaban a la mujer como un objeto del deseo, ella pintaba a la mujer desde la perspectiva de su propia experiencia.
Es una artista completa que han querido reivindicarla en su país de origen para que siga el camino de Frida Kahlo, palabras de la investigadora canaria Elena Morales, autora del libro “Los universos mágicos de Remedios Varo e Isabel Allende” y quien espera que se ponga de moda y siga el camino de la Kahlo.
También quien ha querido hacerle justicia es la escritora cubana Zoé Valdés, al retomar la figura de Remedios Varo en su nueva novela “La cazadora de astros”, pues asegura haberse identificado con su forma de ser y de sentir, amén de que es una admiradora de la obra de Varo.
Y Como parte de los festejos del centenario de su natalicio, el Museo de Arte Moderno de la ciudad de México ha abierto desde el 22 de mayo y hasta el 24 de agosto la exposición “Remedios Varo. Cinco llaves”, en la que se muestran 3 obras inéditas: “La mujer libélula”, un manuscrito recién descubierto llamado “Sueños y recetas” y el boceto de la obra “Descubrimientos de un geólogo mutante”.
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